martes, 13 de octubre de 2009

17 de Octubre de 1945: Día de la Lealtad Peronista


Haciendo memoria....

Por aquellos años, el presidente, general Edelmiro Farrell nombró al coronel Juan Domingo Perón Secretario de Trabajo y Previsión, Ministro de Guerra y Vicepresidente de la Nación, cargos en los que desempeñó una intensa actividad. Por el desempeño en la Secretaría de Trabajo y Previsión, comenzó a crecer la popularidad de Perón en la clase trabajadora, lo cual despertó desconfianza en muchos de los mandos del Ejército, que mantenían una concepción conservadora y elitista de la sociedad argentina. A tal punto llegó esta situación que, pese a estar desempeñando en 1945 los cargos antes mencionados, el Coronel Perón fue obligado a renunciar a todas sus funciones el 10 de octubre de ese año. El día 13 fue llevado detenido a la Isla Martín García (situada en el Río de La Plata, frente a la ciudad de Buenos Aires).

Una vez conocida por los trabajadores la noticia de la detención de Perón, se declaró una huelga general espontánea en todo el país. Contingentes obreros y peones de campo en su mayoría, pero también hasta civiles, comenzaron a marchar hacia la Casa de Gobierno, en la ciudad de Buenos Aires, cubriendo la Plaza de Mayo con una multitud que reclamaba la libertad del General.

Desde las primeras horas de la mañana del 17 de Octubre, llegaban columnas de manifestantes con banderas y pancartas a la Plaza de Mayo. Venían desde Avellaneda, Lanús, Banfield, Quilmes, San Martín. Cruzan el Riachuelo por el puente Pueyrredón. Cuando la policía levanta el puente, siguen cruzando en botes, tablas o a nado. Los manifestantes, refrescándose los pies en las fuentes de la Plaza, se convertirían en todo un símbolo del movimiento nacional y popular más importante de Argentina: El Peronismo. Antonio Cafiero reflexionaba, muchos años después, que ese “refresco” de los pies, fue debido a que el subsuelo de la patria, que venía con los pies desnudos caminando sobre el asfalto caliente durante horas y por kilómetros, es lo que generó el “refresco” de aquellas ampollas en sus pies hervidos. Todo por la Patria. Todo por la Causa. Todo por Perón.

Este movimiento espontáneo, es reconocido como el mayor fenómeno político y social que ha visto la historia argentina, y uno de los poco en la historia mundial, comparado por ejemplo, con la Toma de la Bastilla en Francia (14 de Julio de 1789).

La revolución pacifica que genero el auténtico pueblo argentino, el cimiento básico de la nación, generó que más de medio millón de personas tomaran las calles de manera enérgica, envueltos de fe y lealtad, unidos por una sola persona: el Coronel Juan Perón; y motivados por un solo afán: su libertad.

"Aquel día yo vi el rostro de la historia en toda su esplendorosa plenitud. Yo era uno cualquiera y sin embargo como un tremendo vendaval me sacudía el orgullo de estar abriendo el cauce de los tiempos venideros" (Raúl Scalabrini Ortiz: pensador, historiador, filósofo, ensayista, periodista, escritor y poeta argentino).


Fue al anochecer del 17 de octubre de 1945 que, ante la presión popular, Perón fue puesto en libertad y convocado por los propios gobernantes militares a hablar a la multitud para calmarla.

Perón así lo hizo, pidió su retiro del Ejército y convertido en ex-militar se lanzó de lleno a la vida política. Tenía 50 años de edad.

Desde aquel entonces es recordado para nosotros, los peronistas, el nacimiento de nuestra doctrina, y establecido el Día de la Lealtad, de la lealtad a Patria y a Perón!


El Pueblo sabe de qué se trata…


Algunos párrafos resaltantes del discurso improvisado de Juan Perón luego de su libertad pedida por el Pueblo Argentino. Si bien el alegato es improvisado, las palabras salen solas, cuando el sentimiento y la convicción son claros.

Desde los balcones de la Casa de Gobierno, la noche

del 17 de octubre, el coronel Perón dirigió la palabra

a más de medio millón de trabajadores concentrados

de forma espontánea en la histórica Plaza de Mayo.


Trabajadores:


Hace casi dos años, desde estos mismos balcones, dije que tenía tres honras en mi vida: la de ser soldado, la de ser un patriota y la de ser el primer trabajador argentino.

Hoy, a la tarde, el Poder Ejecutivo ha firmado mi solicitud de retiro del servicio activo del ejército. Con ello he renunciado voluntariamente al más insigne honor a que puede aspirar un soldado: llevar las palmas y laureles de general de la Nación. Lo he hecho porque quiero seguir siendo el coronel Perón y ponerme con este nombre al servicio integral del auténtico pueblo argentino. Dejo, pues, el honroso y sagrado uniforme que me entregó la patria, para vestir la casaca del civil y mezclarme con esa masa sufriente y sudorosa que elabora en el trabajo la grandeza del país…..

Esto es pueblo; esto es el pueblo sufriente que representa el dolor de la madre tierra, al que hemos de reivindicar. Es el pueblo de la patria, el mismo que en esta histórica plaza pidió frente al Cabildo que se respetara su voluntad y su derecho. Es el mismo pueblo que ha de ser inmortal, porque no habrá perfidia ni maldad humana que pueda someter a esta masa grandiosa en sentimiento y en número. Esta es la verdadera fiesta de la democracia, representada por un pueblo que marcha a pie durante horas para llegar a pedir a sus funcionarios que cumplan con el deber de respetar a sus auténticos derechos……

Hace dos años pedí confianza. Muchas veces me dijeron que ese pueblo por el que yo sacrificaba mis horas de día y de noche habría de traicionarme. Que sepan hoy los indignos farsantes que este pueblo no engaña a quien no lo traiciona. Por eso, señores, quiero en esta oportunidad, como simple ciudadano, mezclado en esta masa sudorosa, estrechar profundamente a todos contra mi corazón, como lo podría hacer con mi madre.

…. que esa unidad sea indestructible e infinita para que nuestro pueblo no solamente posea la felicidad, sino también sepa defenderla dignamente. Esa unidad la sentimos los verdaderos patriotas, porque amar a la patria no es amar sus campos y sus casas, sino amar a nuestros hermanos….

Trabajadores: únanse; sean hoy más hermanos que nunca. Sobre la hermandad de los que trabajan ha de levantarse en esta hermosa tierra la unidad de todos los argentinos…..








"Mundo Peronista"
Leo y Guille

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